Cuando nos preguntan si es bueno utilizar un irrigador para la limpieza diaria de la boca, desde Policlínica Dental Giraldo nos gusta dar una respuesta con matices. Es innegable su utilidad para complementar la acción del cepillado y la seda dental, sobre todo en pacientes concretos de los que hablaremos ahora, pero hay que saber utilizarlo bien para no causarnos daños en la propia boca. Pide consejo siempre a tu dentista antes de empezar a usarlo, o solicita una cita previa con nosotros y te contamos todos los detalles.
¿Qué es un irrigador bucal?
En las consultas dentales lo utilizamos mucho, así que lo conocerás por las visitas regulares que hagas a tu dentista. Estos irrigadores para usar en casa funcionan con un chorro a presión que debemos orientar a dientes y encías, eliminando de esta forma posibles restos de comida que todavía queden tras el cepillado. Lo más importante es interiorizar que su uso no excluye para nada al cepillo de dientes.
Existen muchos modelos de irrigadores ya en el mercado, pero las características no difieren mucho entre ellos. Cuentan con un depósito de agua que puedes rellenar del grifo, la bomba que ejerce presión y la boquilla por la que sale el agua. La presión es regulable y las boquillas son extraíbles para que cada persona en casa use la suya.
¿Es bueno usar un irrigador para la boca?
Sí, es bueno usar un irrigador para la limpieza de la boca y más en algunos casos concretos. Por ejemplo, los especialistas de Policlínica Dental Giraldo los aconsejamos como herramienta para reducir la placa bacteriana o el riesgo de inflamación de los pacientes a los que sometemos un implante. Igual de efectivos son para los usuarios de ortodoncia.
Para los pacientes en general, el uso de un irrigador para la boca también tiene interesantes beneficios, pero cuando al principio hemos subrayado que primero pidas consejo a tu dentista lo hacemos por algo: es importante que te enseñemos a usarlo porque, igual que ocurre si se usa mal algo tan sencillo como un cepillo, el irrigador puede llegar a causar lesiones bucales si no regulas bien la presión del chorro o no apuntas a los rincones clave.
Una vez sabes utilizarlo, los irrigadores son perfectos para llegar a los puntos de la boca en los que siempre quedan restos de comida pero no se llega con otros productos. Además, es efectivo para tener controlada la placa, tanto en los implantes como ya hemos apuntado, como en los aparatos y dentaduras en general. Algunos modelos incluso son compatibles con echar colutorios en sus depósitos, incrementando todavía más la calidad de la limpieza obtenida.
Confía en nuestro equipo de dentistas en Vilagarcía de Arousa
En conclusión, utilizar el irrigador en la limpieza diaria de la boca no es malo, sino todo lo contrario. Solo hay que saber cómo utilizarlo correctamente, usar siempre la presión adecuada y no complementar nunca su acción con productos no aptos como los que mucha gente utiliza para blanquear. Tanto para usarlo correctamente, como para descubrir cómo sacar el máximo partido del irrigador bucal (o contarte todo lo que quieras saber sobre los blanqueamientos), te dejamos nuestros datos de contacto y así pedir una cita previa cuando quieras. El equipo de odontólogos de Policlínica Dental Giraldo en Vilagarcía estará encantado de recibirte.